El pasado 25 de Septiembre los niños tuvieron la oportunidad de sentir a un caballo con los ojos cerrados, de conocer a unos potrillos, de montar, de aprender algunas palabras nuevas, de observar como Norberto herraba un caballo, de conocer a " Clementillo" el pavo real. Gracias a Paloma y familia por abrirnos las puertas de su casa y compartir con nosotros su amor y cuidado a los animales.
La relación cercana con los animales permite que los niños se asombren, respeten, respondan, observen la Vida; de está cercanía brota un sentimiento de admiración a la Naturaleza.
lunes, 14 de septiembre de 2009
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